Una conversación con Spassky

viernes, 4 de febrero de 2011 · 01:00

MÉXICO, D.F., 2 de febrero (apro).- El pasado 30 de enero, Boris Spassky cumplió 74 años. Lamentablemente no pudo festejar apropiadamente, pues está internado en un hospital de París.

Spassky sufrió una segunda apoplejía el pasado mes de septiembre del 2010 y el excampeón mundial, quien perdiera el título ante Bobby Fischer, sigue bajo vigilancia médica.

El reportero alemán, Dagobert Kohlmeyer ha hablado con él y confirmó que Spassky, a pesar de todo, ha conservado su estupendo sentido del humor de siempre. He aquí la breve entrevista a uno de los campeones mundiales más fantásticos:

Dagobert Kohlmeyer (DK): Buenos días, Boris. ¡Felicidades por tu cumpleaños!

Boris Spassky (BS): Muchas gracias. Es muy amable que me llames por teléfono.

DK: ¿Cómo estás?

BS: De momento me mantengo. Aunque no sea cosa fácil, estoy procurando practicar una defensa completa. Me estoy oponiendo a la enfermedad. Es bueno que esté tumbado sobre un colchón suave.

DK: ¿En qué parte de París se encuentra el hospital en el que estás ingresado?

BS: Está ubicado a unos ocho kilómetros desde nuestra casa, en dirección hacia el aeropuerto.

DK: ¿Tienes internet en la habitación del hospital? Acaba de terminar el torneo en Wijk aan Zee.

BS: Sí, de vez en cuando he mirado lo que estaba ocurriendo allí.

DK: Hikaru Nakamura acaba de coronarse vencedor. ¿Qué tal te parece eso?

BS: La verdad es que no me gusta mucho su ajedrez. Para mí es el jugador menos interesante.

DK: ¿Por qué?

BS: Nakamura juega un ajedrez muy raro, un poco como si fuese un pequeño tanque japonés. Yo cruzo los dedos por otros grandes maestros.

DK: ¿Quién es tu favorito?

BS: Siempre estoy pendiente de Magnus Carlsen. Es el más joven de ellos y aún así ya comprende tanto del ajedrez. Eso, francamente, me encanta de ese chico.

DK: ¿Es el mejor para ti, mientras tanto?

BS: No lo sé, porque ahí en la cima son todos muy fuertes. Me cae bien simplemente porque juega de esa manera atrevida, a pesar de su joven edad. Un poco como lo solía hacer Mischa Tal, en sus tiempos. Carlsen es un ladrón del ajedrez un pirata, bueno, o sea que un auténtico vikingo.

DK: Pero el noruego se ha retirado del circuito actual por el Campeonato del Mundo. ¿Te parece correcto eso?

BS: Y qué más da, déjale tranquilo. Es cosa suya. Todavía puede llegar a ser campeón del mundo.

DK: Garry Kasparov ha criticado el retiro de Carlsen y opina que debe luchar y trabajar más duro.

BS: ¿Por qué? Quizá Magnus está teniendo otras cosas en la cabeza, quizá está enamorado o algo así.

DK: Con toda la clase que tiene, Carlsen sigue perdiendo demasiadas partidas. ¿Debería volver a entrenarse con Kasparov?

BS: No, no sé. Magnus, igual ha trabajado demasiado en el año que se ha entrenado con Garry y ahora está un poco quemado. Igual ahora es cuando se está recuperando de Kasparov. Simplemente se está tomando unas vacaciones de él.

DK: Me doy cuenta que desde luego no has perdido tu sentido del humor.

BS: Es humor de hospital.

DK: ¿Qué es lo que más te ayuda en tu situación actual?

BS: Me encanta escuchar música. Debe ser alegre, de ser posible, entonces me anima y me da nuevas fuerzas.

DK: ¿has tenido visita de tu familia hoy?

BS: No, hasta ahora no. Estoy esperando su visita y confío en que mi gente me traiga una copita de vodka. Hasta ahora no ha habido ni rastro del aguardiente aquí.

DK: Esto tiene que ser acompañado por una rica comida.

BS: Sí, un bocadillo con caviar negro. Sabe mejor que el rojo, pero de momento es difícil de conseguir. Igual aún tienen un poquito en Irán. En el lado ruso del Mar Caspio ya no hay esturiones.

DK: Has padecido y sobrevivido dos apoplejías. ¿Cómo va la convalecencia?

BS: Al principio era muy difícil coordinar bien los movimientos. Es un poco así como si en un avión fallase el sistema de navegación. Mientras tanto ya no tengo muchos problemas con la coordinación. Puedo hablar normal, tal y como me escuchas y aparte de ruso también hablo un poco de inglés.

DK: ¿Cuándo te darán el alta?

BS: Los médicos no lo quieren decir. Creo que voy por el medio juego. Probablemente la cosa se prolongará un tiempo más. Lo importante para mí es salir bien del medio juego, para luego tener un final favorable.

DK: ¡Eso te lo deseamos todos y de todo corazón, Boris!

BS: ¡Muchas gracias!

 

Como puede verse, Spassky sigue siendo el mismo. Sus problemas de salud no han menguado su buen humor. Esperamos su pronta recuperación que, claro, será lenta; pero estamos seguros que pronto lo veremos como invitado de honor en alguno de los torneos más importantes del mundo.

Comentarios