CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Bajo el estruendo de aplausos y gritos, Andrés Manuel López Obrador se asomó a saludar, con una sonrisa de triunfo en el rostro, a sus simpatizantes desde la ventana de su casa de campaña. En su primera aparición pública como virtual presidente electo, López Obrador se inclinó con los brazos cruzados en el pecho para agradecer a la muchedumbre que se aglutinó frente al edificio a lo largo de la tarde. "Sí se pudo, sí se pudo", corearon los centenares de personas, izando banderas de México y celulares para grabar el momento histórico. Beatriz Gutiérrez Müller, la esposa del próximo presidente de México, provocó una segunda ola de gritos cuando se asomó a la ventana para saludar a la masa. En las calles aledañas retumbaban cláxones de victoria. Minutos después, el político tabasqueño salió del edificio en su Jetta Clásico de color blanco, a paso muy lento: con dificultades, el vehículo trazó su camino entre la marea de periodistas y simpatizantes que casi trepaban al carro para captar imágenes de su ocupante. De ahí, agarró rumbo al Hotel Hilton, donde dio una conferencia de prensa, previa a la celebración pública que se llevará a cabo en el Zócalo capitalino. La aparición del líder de Morena marcó el final de una espera de varias horas para sus seguidores, quienes lo alentaban a gritar consignas a todo pulmón, perdiendo la paciencia a veces. "Ya el tigre se está cansando", dijo uno de ellos en una carcajada. Apenas desapareció el vehículo, se dispersó la gente. Muchos se dirigían al Zócalo.