MÉXICO, D.F. (apro-cimac).- Las elecciones federales de este año se convirtieron en el primer proceso en el que los partidos polÃticos postularon 40% de candidatas, de las cuales más del 30% resultaron electas en el caso de la Cámara de Diputados.
En 1993 se reformó la fracción tercera del artÃculo 175 del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe), para establecer criterios que compensaran las desventajas de la participación polÃtica femenina.
Con la modificación se recomendó que los partidos promuevan una mayor participación de las mujeres en la vida polÃtica del paÃs, mediante su postulación a cargos de elección popular en los términos que determinen sus documentos internos.
Posteriormente, en 1996, se aprobó una adición a la fracción 22 transitoria del artÃculo 5 del Cofipe, para estipular que los institutos polÃticos consideraran en sus estatutos no exceder el 70% de candidaturas de un mismo sexo para diputaciones y senadurÃas.
En 2002 la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad la cuota de 30% en candidaturas femeninas a cargos federales de elección popular. El espÃritu de esa reforma fue avanzar hacia una democracia paritaria en la que mujeres y hombres accedan por igual a puestos de mando.
De acuerdo con el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), en América Latina 13 paÃses han adoptado la cuota de género: Argentina, Brasil, Bolivia, Costa Rica, Ecuador, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Colombia y Venezuela.
Hasta abril de 2011, en todo el mundo, la proporción promedio de mujeres en legislaturas o parlamentos era de 19.5% para la Cámara baja (o única en algunos paÃses), y de 18.3% para las cámaras altas o Senados.
En México las mujeres han luchado porque las cuotas sean obligatorias para los partidos, sin embargo, datos del TEPJF indican que desde 1996 hasta 2008 sólo el 1.9% de los juicios que resolvió el tribunal tenÃa que ver con las cuotas de género, lo que refleja que las militantes no reclamaban su derecho a ser postuladas.
No obstante, fue una sentencia del tribunal electoral la que marcó la participación polÃtica de las mujeres en este 2012, luego de que un grupo de mujeres de distintos partidos promovieron un juicio para obligar al cumplimiento de la cuota de género.
En noviembre de 2011 el TEPJF ordenó que los institutos polÃticos debÃan postular un mÃnimo de 40% de mujeres candidatas, tanto titulares como suplentes, para diputaciones federales y senadurÃas.
Según datos del Instituto Federal Electoral (IFE), por primera vez de las 543 mujeres que compitieron en la jornada del pasado 1 de julio para obtener un escaño en la Cámara baja, 95 obtuvieron una diputación de mayorÃa relativa, es decir el 31.7%.