CIUDAD DE MÉXICO (apro). – Una fuerte infección provocada aparentemente por la colocación de un piercing en la boca, fue la causa de muerte de Andressa Souza, de 20 años, en el municipio de Dourados, Mato Grosso del Sur, Brasil.

El 9 de julio, esta joven acudió a un lugar para perforarse el labio sin imaginar que después experimentaría fiebre acompañado de dolor de cabeza y malestar general, señalaron medios locales.

Estuvo 24 días internada en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital da Vida, donde fue intervenida quirúrgicamente, informó su madre, María Aparecida da Silva Oliveira, de 47 años.

La familia de esta chica sospechaba que era un caso de dengue, enfermedad transmitida por mosquitos y de la que ya se habían registrado algunos casos en la ciudad, indicaron los medios.

La salud de Andressa estaba cada día peor, por lo que tuvo que ser ingresada de urgencias en el Hospital da Vida, comentaron.

“Vimos que tenía la boca muy hinchada, no había manera de moverla. Estaba tan hinchada que no había manera de sacar el piercing”, aseguraron.

Tras una serie de estudios los médicos determinaron que Andressa tenía sepsis, una infección en la sangre que ya había comprometido el 37% de su cerebro, señalaron.

“Se le hicieron varias pruebas y luego el médico descubrió, según le transmitieron a mi yerno, que habría sido por el piercing que llevaba. Tiene una infección por el piercing. Esta infección terminó en el torrente sanguíneo y desde la red sanguínea se alojó en el cerebro. Y afectó 37% de su cerebro”, señaló la madre.

Las autoridades investigan el lugar donde la joven se practicó la perforación y las condiciones sanitarias pudieron ser un factor importante en la infección, mencionaron.

Andressa se había puesto el accesorio hace dos meses. María no sabe si su hija fue a un lugar adecuado para hacerse este tipo de procedimiento, informaron los medios brasileños.

“No sé si fue en algún lugar especializado. No me mencionó nada sobre si la persona era un profesional. Me acaba de decir que había pagado R$ 60 (Unos 230 pesos mexicanos) para ponérselo”.

Según María, durante su tiempo en el hospital la joven fue intubada. Andressa estaba casada y tenía un hijo de 3 años.

“También está triste porque, con lo pequeño que es, vio a su madre en esa situación. Es muy difícil para él. Si es difícil para nosotros que somos adultos, imagina para él que es un niño, un bebé, que acaba de empezar su vida. Ayer me dijo en el velatorio: ‘Abuela, mi pequeño amor’ (refiriéndose a su madre). Me dolió mucho”, afirmó.

El cuerpo de Andressa fue sepultado en el Cementerio Cristo Redentor, resaltaron.

Pese a lo anterior, la Fundación de Servicios de Salud de Dourados (Funsaud), que administra el Hospital da Vida, dijo que no era posible decir que la muerte de la joven estuviera relacionada con un piercing.